| Résumé: | La conmemoración en 1995 del final de la segunda guerra mundial ha sido una efemérides de obligada remembranza para el pueblo coreano. Hace medio siglo el término de este cruento acontecimiento significó para Corea, no sólo su liberación del dominio japonés, sino su separación en dos entidades políticas contrarias, producto del desacuerdo de todas las fuerzas nacionalistas que lucharon por lograr un Estado independiente de la intromisión extranjera. A lo largo de todo este tiempo, se ha sucedido una cadena de cambios en el interior de la Corea dividida, que han transformado a ambas partes de la sociedad coreana.
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